-->

lunes, 8 de junio de 2009









Espero curarme de ti en unos días.
Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte.
Es posible.
Siguiendo las prescripciones de la moral
en turno.
Me receto tiempo, abstinencia, soledad.

¿Te parece bien que te quiera nada más
una semana?
No es mucho, ni es poco, es bastante.
En una semana se pueden reunir todas las
palabras de amor que se han pronunciado
sobre la tierra y se les puede prender fuego.

Te voy a calentar con esa hoguera del
amor quemado. Y también el silencio.
Porque las mejores palabras del amor están
entre dos gentes que no se dicen nada.

Hay que quemar también ese otro lenguaje
lateral y subversivo del que ama
tú sabes cómo te digo que te quiero
cuando digo: "qué calor hace", "dame agua",
"¿sabes manejar?,"se hizo de noche"...
Entre las gentes, a un lado de tus gentes
y las mías, te he dicho "ya es tarde",
y tú sabías que decía "te quiero").

Una semana más para reunir todo el amor
del tiempo.
Para dártelo. Para que hagas con él
lo que tú quieras:
guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura.
No sirve, es cierto.
Sólo quiero una semana para entender
las cosas.
Porque esto es muy parecido a estar saliendo
de un manicomio para entrar a un panteón.

Jaime Sabines


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Hølå! Ðëjå tü çømëntå®îø ø çømÞå®të ålgún të×tø qüë të gü§të, g®åçîå§ :)